Rebeca Illescas, ex ministra de Minería de Ecuador: “Debemos pensar y repensar el desarrollo de la industria minera en colaboración”

Mar 20, 2023 | Crónica Minera

La ex secretaria de Estado de Ecuador conversó con ELECTROMINERÍA, instancia en la que también abordó los desafíos que deberá enfrentar el sector minero a nivel global como parte de los planes mundiales de descarbonización.

Comparte en:

Como parte de su análisis y en conversación con Electrominería, la ex secretaria de Estado de Ecuador, se refiere entre otras materias, a los desafíos que deberá enfrentar el sector minero a nivel global como parte de los planes mundiales de descarbonización.

Del mismo modo, avizora que esta industria, empresas y gobiernos deberán enfrentar las sensibilidades sociales y ambientales para poder avanzar en las inversiones previstas.

En materia de colaboración mutua entre ambos países, la abogada y especialista en elaboración y desarrollo de políticas públicas para inversión en sectores estratégicos, destaca que el desarrollo de la industria minera en Chile, el conocimiento y los espacios de innovación pueden apoyar a reducir la brecha de la industria en Ecuador.

Al mismo tiempo, sostiene que Ecuador es un país poco explorado donde menos del 5% ha sido explotado por la minería, lo que abre las expectativas para una demanda internacional de minerales durante los próximos años.

 A modo general y según su experiencia en el sector ¿cuáles son los principales desafíos que enfrenta la minería a nivel mundial?

Según el World Energy Outlook elaborado por la Agencia Internacional de Energía (AIE) durante 2021, de aquí a 2040 se cuadruplicará la demanda de minerales como el cobre dedicados a la construcción de tecnologías de energías limpias. Los planes mundiales de descarbonización requerirán una importante capacidad minera adicional para permitir el crecimiento en los vehículos eléctricos, el almacenamiento de energía y la transmisión de electricidad.

De acuerdo a todos los estudios y proyecciones de la industria de energía para los próximos 20 años, se requiere un 50% más de la producción de minerales en el mundo. Adicionalmente a esta enorme demanda, no existen suficientes proyectos greenfield y los que están en operación requieren importantes inversiones. De la mano de esta necesidad, también ha crecido la preocupación por la gestión y operación de los proyectos mineros en todo el mundo, generando una dificultad para el desarrollo de nuevos proyectos.

Para los próximos años, la industria, empresas y gobiernos deberán enfrentar las sensibilidades sociales y ambientales para poder avanzar en las inversiones previstas.

En este sentido, los escenarios determinantes serán la economía de China, el abastecimiento de material y maquinaria para operar, así como también, una oportuna solución de energía y manejo de agua como es el caso de Chile.

Publicidad

En el plano local, ¿qué desafíos enfrenta la minería en Ecuador?

La industria minera en Ecuador es aún incipiente con apenas dos proyectos en operación de minería a gran escala, con una desinstitucionalización del sector público que ha permitido, entre otros factores, un crecimiento de la inestabilidad para el desarrollo de los proyectos mineros.

Sin embargo, Ecuador es un país megadiverso e intercultural, con un importante desafío para generar políticas que acompañen una industria minera responsable. Yo siempre menciono que esta es una oportunidad de hacer las cosas bien y de una forma distinta. Hoy tenemos mejores prácticas en la industria minera, es más controlada, con mejores estándares y una interesante innovación que puede permitir realizar actividades que busquen soluciones a operaciones en áreas ambiental y socialmente sensibles.

Para los próximos años en el corto plazo, el gobierno y la industria deberán resolver temas fundamentales como la consulta previa libre e informada a las comunidades, una consulta ambiental establecida por la Corte Constitucional para todos los proyectos productivos en Ecuador, así como posibles reformas a la Ley de Minería y una nueva Ley de Recursos Hídricos. No creo que a las empresas le preocupen los cambios y los estándares, lo que a todos nos preocupa es la falta de definiciones legales y políticas que son difíciles de manejar con el tiempo de las operaciones.

¿Cuál es el potencial minero y energético que actualmente ofrece Ecuador para el desarrollo de ambos sectores?

Ecuador es un país poco explorado, menos del 5% ha sido explotado por la minería de acuerdo a los datos del Ministerio de Energía. Esto nos lleva a tener grandes expectativas para una demanda internacional de minerales para los próximos años. Compartimos información geológica similar con nuestros vecinos como Perú y Colombia y la misma cordillera con Chile, por lo cual el potencial sin duda es alto.

Adicionalmente, durante los últimos 14 años, Ecuador ha invertido mucho en mejorar las condiciones competitivas para las inversiones y desarrollo de la industria, tenemos energía hidroeléctrica a costos bajos, acceso a agua, carreteras, puertos y aeropuertos potenciados.

También trabajamos para tener una carga fiscal competitiva, con importantes reformas para que se puedan desarrollar proyectos de minería que sean beneficiosos para todas las partes. Desde el año 2016 se domiciliaron más de 27 empresas nuevas en el Ecuador, operadoras de clase mundial. La matriz energética en el país es casi en su totalidad hidroeléctrica, con una inversión pública de más de 8 mil millones de dólares  durante el Gobierno del Presidente Rafael Correa, que ha permitido no solamente tener soberanía energética sino también permitir un desarrollo industrial. Hoy, el Gobierno del Presidente Guillermo Lasso, tiene el desafío de diversificar esta generación y ampliar la red de transmisión, procesos que pueden ser interesantes para la inversión privada.

¿Qué posibilidades de cooperación mutua entre Chile y Ecuador ve usted que existe en el ámbito de la minería?

Veo muchas. Somos países complementarios, el desarrollo de la industria minera en Chile, el conocimiento y los interesantes espacios de innovación pueden apoyar a reducir la brecha de la industria en Ecuador. Siempre hemos sido socios políticos y diplomáticos, siento que podríamos ser mejores socios comerciales, aunque no se ha impulsado mucho este espacio o no se han concretado alianzas mayores.

Tenemos, sin embargo, algunos proyectos en colaboración con empresas chilenas como el caso de Fruta del Norte, con proveedores de Chile y he visto que algunas empresas de servicios están mirando a Ecuador.

Por otro lado, está el acuerdo con Codelco, para el desarrollo del proyecto Llurimagua, que esperamos se resuelva en el corto plazo en beneficio de los dos países, convirtiéndose posiblemente en una de las minas más interesantes para los próximos años en la región.

La Empresa Nacional Minera de Ecuador (Enami) y la estatal chilena Codelco suscribieron un acuerdo para la explotación del proyecto minero Llurimagua, ubicado en la provincia de Imbabura en Ecuador.

¿Cómo observan desde Ecuador la experiencia minera de Chile en materia de ingeniería, proveedores y profesionales al servicio de la actividad?

Tenemos importantes sinergias que se deben potencializar y aprovechar. Chile tiene una historia de más de 50 años de una industria en desarrollo, nosotros recién tenemos dos minas en operación, por lo tanto, la brecha es grande.

Sin embargo, podemos ser un laboratorio para el desarrollo de nuevas tecnologías y de innovación que permita entender cómo operar proyectos en zonas con diversidad ambiental y social, al ser Ecuador un perfecto caso de estudio sobre mega diversidad.

Por otra parte, en Ecuador existe un know how sobre la industria del petróleo, con aciertos y errores que nos ha permitido desarrollar en el tiempo, mejores metodologías de trabajo con las comunidades y la experiencia de la creación de leyes y normativa que buscan ser más justas y equitativas, especialmente en las zonas donde se distribuyen estos recursos.

Tenemos un camino recorrido y estamos en permanente análisis de las políticas sociales. Es para nosotros determinante entender y escuchar a las comunidades como parte de un proceso de desarrollo industrial, que debe ser acompañado por la sociedad.

Los beneficios de la minería y del petróleo deben ser en primer lugar para nuestros países, en ese camino un ganar para las empresas, pero no descuidar que debemos impulsar el desarrollo de mejores condiciones sociales, laborales y de proveedores en nuestros países.

Hace pocos días usted, junto a una universidad de Quito, organizaron en Ecuador un Taller sobre cómo comunicar minería, en el que participó un periodista de Electrominería. A su juicio ¿a qué responde la idea de impulsar esta iniciativa?

Fue una colaboración enriquecedora para todos, y así es como deberíamos operar en la vida, mirando cómo podemos aportar para esta conversación de qué hacemos bien y qué no estamos haciendo. La industria de la minería y de la energía, no la hacen solas las empresas y los gobiernos, es un ecosistema que involucra muchos actores, la academia, las comunidades, los comunicadores, profesionales, etc. Esta iniciativa nació de la necesidad de hacer este intercambio de ideas, de la voluntad mutua, de su periodista Juan Pablo Aracena y mi interés de siempre hacer más y conocer de parte de él, cómo se comunica minería en Chile.

En el evento, participaron más de 50 comunicadores sociales, gestores políticos de los Ministerios relacionados y empresas de la industria minera de Ecuador. Nos quedamos siempre con la sensación que estamos en el camino correcto, pero que falta aún mucho por recorrer.

¿Cuáles fueron las principales conclusiones que allí se obtuvieron?

Debemos pensar y repensar el desarrollo de la industria en colaboración, no vernos como países independientes de los intereses particulares. Siempre nos va mejor cuando colaboramos en la región, sobre todo en momentos geopolíticos donde entablar las diferentes crisis que tenemos como bloque regional, podría potenciar el desarrollo de todos nosotros.

Aprender del camino recorrido por otros países es siempre importante, la cooperación técnica nos puede reducir la brecha tecnológica en años, así como las experiencias desde lo político y social. Todos los participantes nos entregaron importantes herramientas para aprender y pensar, cómo comunicar una minería bien hecha, es uno de los desafíos de la industria no solo en Chile y Ecuador, sino en el mundo para los próximos años.

Publicidad